Amnistía Internacional (AI) ha pedido al Rey de España, Juan Carlos primero plantearen subir con las altas autoridades marroquíes, la cuestión de los derechos humanos durante su visita de Estado a Marruecos.
Amnistía emitió una declaración en la que pide al Rey de España de abordar la cuestión de los derechos humanos durante su visita a Marruecos del 15 al 17 de julio.
El tema, el calendario y la metodología elegida por AI para transmitir sus mensajes a Marruecos, siempre han suscitado dudas para con la inocencia del acto. En esta ocasión, AI habiera ido un poco más allá en el ejercicio de sus funciones.
Un ex diplomático latinoamericano reprocha a Amnistía Internacional de haber intentado encargar el soberano español de jugar en su lugar, el papel de defensor de los derechos humanos con las autoridades marroquíes, olvidando que Marruecos es un país soberano y no està bajo el dominio español, como en la época de la era colonial.
¿Por qué entonces la ONG internacional que defiende los derechos humanos y también aboga por el respeto de todos los derechos civiles, políticos, económicos, sociales y culturales, optó por hacer llegar su mensaje através del Rey de España en lugar de desafiar directamente al Gobierno marroquí?
Este problema, dice el ex diplomático PGA, encuentra su respuesta en el hecho de que el enfoque no es propio a AI, pero habiera sido dictada por una tercera parte que trata de empañar la imagen de Marruecos en el ámbito de los derechos humanos para debilitar su posición en las negociaciones sobre el arreglo del conflicto del Sahara.
No dejàndose engañar, el rey Juan Carlos 1ero y sus consejeros se han rápidamente dado cuenta de la trampa que les fue tendida y simplemente ignorarón la petición de Amnistía Internacional. El jefe del Frente Polisario, Mohamed Abdelaziz y sus gurús argelinos deben morder el meñisque por està pelota perdida.