Los combatientes de los grupos terroristas que ocuparon el norte de Malí antes de ser desalojados por las tropas militares francesas y africanas huyen. Un buen número de ellos que lucharon en las filas de los tres grupos terroristas radicados en Malí y en el Sahel, han encontrado refugio en los campamentos de Tinduf, en territorio argelino. Según la agencia AFP, citando fuentes militares de Malí, «muchos combatiéntes » del Movimiento por la singularidad y la Yihad en África Occidental (MUJAO), y otras franquicias de Al Qaeda que ocupaban el norte Malí durante varios meses en 2012, «volvierón a los campamentos del Polisario».
Después de sufrir fuertes pérdidas desde enero de 2013 (400 muertos), según el ejército francés, los combatientes del Mujao, Al-Qaeda en el Magreb Islámico Dine (AQMI) y Ansar Din siguen huyendo el frente de los combates en el norte de Mali, en dirección de los países vecinos.
En respuesta a una noticia de la agencia AFP difundida por su oficina en Bamako, el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de Argelia, Amar Belani, no pudo contenerse a sí mismo y arremetio directamente contra la agencia de noticias francesa , calificando su noticia de » grosera empresa de desinformación».
En lugar de ordenar la apertura de una investigación, como es la norma en esta situación, para verificar la exactitud de la información transmitida por los medios de comunicación, las autoridades argelinas prefieren tratar directamente con los medios de comunicación en un vano intento de descréditarlos.
Debemos recordar que tres humanitarios occidentales dos españoles y una italiana fueron secuestrados en octubre de 2011 a unos cientos de metros de la sede del Frente Polisario en el campamento de Hassi Rabuni y fueron conducidos a Malí a través todo el desierto argelino. Un secuestro que se llevó a cabo con la complicidad interna de la seguridad del movimiento separatista saharaui en una de las zonas de seguridad màs vigiladas por el ejército argelino.
También conviene recordar que a la cabeza de la mayoria de los grupos terroristas que pululan en el Sahel son emires argelinos. ¿Por qué entonces querrer negar cualquier precio las informaciónes sobre la presencia de terroristas en los campamentos de Tinduf, mientras que los propios argelinos saben que están presentes en todas partes, en todos los rincones del país? Esta es una pregunta que ni sus superiores ni Amar Belani puede responder, sino, de qué sirve la política del avestruz, si no es de negar a admitir la realidad!