París y Londres han renovado tal como Washington, su apoyo a una solucion politica justa y duradera al viejo conflicto del Sáhara Occidental de edad.
En Paris, el portavoz del Quai d’ Orsay, Romain Nadal preciso durante una rueda de prensa el miércoles que Francia apoyaba una solucion politica justa, duradera y mutuamente acordada.
«El status quo no es en el interés de nadie», dijo, asegurando que Francia apoya desde hace tiempo » la busqueda de una solucion politica justa, duradera y mutuamente acordada bajo los auspicios de las Naciones Unidas y de conformidad con las resoluciones del Consejo de Seguridad.»
Preguntado sobre el plan de autonomía marroquí para el Sahara que ha recibido la semana pasada, con motivo de la visita real a Washington, un fuerte apoyo de la administración Obama, el portavoz Nadal aseguró que su país considera, por su parte , esta iniciativa «como una base seria y creíble para una solución negociada».
La Posición de París en este asunto «es clara y constante», dijo, recordando que el presidente François Hollande tuvo la oportunidad de reafirmar en su primera visita de Estado a Marruecos en abril pasado.
Mismo repicar de las campanas en Londres, donde el ministro marroquí de Asuntos Exteriores y de Cooperación , Salaheddine Mezuar, aseguró que «el Reino Unido apoya toda propuesta que vaya en la dirección de una solución política a la cuestión Sahara».
«Los británicos reconocen los esfuerzos realizados por Marruecos para llegar a una solución política definitiva a este conflicto artificial «, dijo el jefe de la diplomacia marroquí, tras una reunión el miércoles en el Ministerio de Asuntos Exteriores, con su homólogo británico, William Hague.
La posición de los tres países, todos ellos miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU, es un apoyo político y diplomático serio para los esfuerzos que Marruecos invierte para resolver definitivamente la cuestión de la disputa artificial creada alrededor de su Sahara y también para acabar con el sufrimiento y la agonía de miles de sus ciudadanos saharauis que se ven obligados a vivir en los campamentos de aislamiento de Tinduf.