La persecusion y la detención del disidente del Polisario, Mustafa Salma Ueld Sidi Mulud a pesar de la publicidad engañosa de su puesta en libertad el 6 de octubre, dice mucho sobre el respeto de los derechos humanos del Polisario y sobre el tratamiento reservado al pueblo saharaui hacinado en los campamentos de Tinduf, en Argelia. Una situación que no deja de tener preocupada su familia como a la comunidad de defensores de los derechos humanos. Las ONGS internacionales, entre ellas Amnistía Internacional, Human Rights Watch y la FIDH han denunciado la detención en régimen de incomunicación y de detención de Mustafa Salma. Considerada como una detención completamente arbitraria, ya que Mustafa Salma tàn solo se ha limitado a expresar su opinión a favor del plan de autonomía marroquí para el Sáhara Occidental. Por su parte, el padre del disidente del Frente Polisario, Mulay Ismaili Mulay Salma Ueld Sidi Mulud, un octogenario debilitado por la edad y por el suplicio que està padeciendo su de su hijo, sigue pidiendo presión hasta la liberacion real de Mustafa del cuàl no sabe aún la suerte.
En cuanto a las preguntas de los especialistas en seguridad, el Director del Centro de Estudios Geopolíticos (OEG) de París, Charles Saint-Prot, destacó la responsabilidad de Argelia que alberga el Polisario en su territorio. Para él, las autoridades argelinas son responsables de la seguridad de las poblaciones de Tinduf y deben garantizar sus derechos humanos, incluido el derecho a la expresión y la libertad de movimiento. Charles Saint-Prot también estima que Mustafa Salma «ha sido detenido y perseguido únicamente por sus opiniones, cuando trataba simplemente de informar a la población de Tinduf sobre el plan de autonomía propuesto por Marruecos». El disidente del Polisario Mustafa Salma «no sólo debe ser puesto en libertad, sino, debe gozar de plena libertad de pensamiento y de movimiento, incluyendo la posibilidad de estar con su familia y seres queridos», insistió Carlos Saint-Prot.