El CDH cuestionado sobre el bloqueo impuesto a los habitantes de los campamentos de Tinduf

El Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas (CDH) ha sido cuestionado el lunes sobre el bloqueo impuesto a las poblaciones encerradas desde hace cuarenta años en los campamentos de Tinduf, en territorio argelino.
La Organización para la comunicación en África y la Promoción de la Cooperación Económica Internacional ( Ocaproce internacional ) solicitó al CDH de hacer presión sobre el Polisario y las autoridades argelinas para incitarlos a levantar el bloqueo a sobre estos campamentos y permitir a los miles de saharauis poder ejercer sus derechos básicos y sus libertades de circulación y de expresión.
«Nuestra organización está especialmente preocupada por la situación de ilegalidad y estamos aquí hoy para hacer llegar sus quejas a la comunidad internacional», dijo Mahjouba Daudi activista, miembro de la ONG con sede en Suiza.

El Ocaproce es una ONG dedicada a la defensa de los derechos económicos, sociales y culturales de las mujeres, los derechos de los niños y de jóvenes desfavorecidos de África y el apoyo de la consecución de los objetivos del milenario por el desarrollo.
La observación hecha en los campamentos de Tinduf , dijo Daudi en la sesión plenaria del Consejo de Derechos Humanos en Ginebra , » nos incita a conminaros a actuar para abrir estos campamentos improvisados y ayudar a las familias y las mujeres a reconstruir su vida social.»
Para las ONG africanas, son las mujeres y los niños que son los más vulnerables en esta franja sin ley. Sólo disponen de la inseguridad perenne debido a la dependencia de la ayuda humanitaria. » Nuestras hermanas estàn entregadas a su suerte en las manos de los dirigentes separatistas, que les hacen padecer el horrendo crimen de embarazo forzado «, dijo la activista Daudi ante la audiencia.
En esta prisión al aire libre, dice, las mujeres saharauis «son constantemente violadas, silenciadas y separadas de sus hijos . «
Los abusos y el trato inhumano que se ha prolongado durante casi cuatro décadas
, pero que la comunidad internacional y las ONG parecen ignorar por completo, cuando es hora de poner las cosas en su lugar correcto.

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