La provincia española de Valencia ha decidido suspender la ayuda a los separatistas saharauis en los campamentos de Tinduf, que los acusa de haber secuestrado una joven madre saharaui de nacionalidad española, que le impide regresar a su lugar de residencia y a su puesto de trabajo en España.
Mahjuba Hamdi Mohamed Daf es una de los cientos de niñas saharauis que el Polisario envia a España cada año para pasar sus vacaciones de verano, sin embargo, son a menudo adoptadas y criados por familias españolas.
Cuando Mahjuba fue enviada por primera vez al Reino Ibérico, apenas tenia 10 años. En el mes de agosto, Mahjuba tiene ahora 24 años, supo la enfermedad de su abuela y se había ido a su lado en los campamentos de Tinduf.
Cuando quiso volver a España, donde tenía que volver a trabajar, pero para su gran sorpresa, los màndamases del Polisario obligarón a su padre a casarla, según los usos saharauis a uno de sus primos. Después de no haber tenido más remedio que someterse a las órdenes de los dirigentes del Polisario, el padre cogió el pasaporte español de Mahjuba asi como de su hija y su teléfono móvil, impidiéndolas de regresar a España y impidiéndo al mismo tiempo, informar a su familia adoptiva.
Mahjuba pero se las arregló para advertir a su familia adoptiva, que a su vez, llevó el caso a las autoridades de la provincia de Valencia donde residia y trabajaba.
Así, el jefe de la cooperación internacional de la provincia ha decidido suspender la ayuda humanitaria que la provincia de Valencia otorga regularmente al Polisario.
De acuerdocon a la información publicada por el diario español de mayor circulación, El Mundo, las ayudas concedidas por Valencia a el Polisario, es de alrededor de 107.000 €. Su objetivo es fortalecer los programas alimentarios y las reservas de agua potable de los campamentos de Tinduf.
Este incidente habria al menos hecho abrir los ojos de algunos simpatizàntes españoles que aún siguen creyendo en la propaganda y las mentiras de los separatistas del Polisario y a apoyar sus argumentos que ignoran el respeto de los derechos humanos, ya que miles de saharauis se someten a la misma suerte en la ignorancia total de la comunidad internacional.