La Unión Europea (UE) exhibe de nuevo, un testimonio de fortalecimento de los mecanismos de vigilancia de los derechos humanos en Marruecos, en particular en el Sáhara Occidental.
La satisfacción de la UE fue reiterada por la voz de su jefe de la diplomacia, Federica Mogherini que, en respuesta a la pregunta de un diputado sobre los derechos humanos en el Sahara marroquí, dio la bienvenida al fortalecimiento de papel de las representaciones regionales del Consejo Nacional de Derechos Humanos (CNDH) en El Aaiún y Dakhla.
A la pregunta de un eurodiputado sobre la situación de los derechos humanos en el Sáhara Occidental, la alta representante de la UE para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad informó sobre la voluntad del reino de consolidar los mecanismos institucionales de respetar y garantizar el respeto de los derechos humanos en el norte y el sur del pais.
En su respuesta por escrito, publicada el martes, en nombre de la Comisión Europea, Federica Mogherini recordó en este sentido, la existencia entre Marruecos y la Unión Europea, de un programa de cooperación bilateral para la protección y promoción de los derechos humanos, y el apoyo a las acciones de la Comisión Nacional de Derechos Humanos y sus dos antenas en el Sáhara Occidental.
Firmado en 2013, este programa cuenta con un presupuesto de 2,9 millones de euros, según la UE, para fortalecer la capacidad institucional de la Comisión Nacional de Derechos Humanos y sus sucursales regionales incluidos en El Aaiún y Dakhla asi como las habilidades profesionales en el monitoreo de la situación de los derechos humanos.
Las aclaraciones de la diplomacia europea se adoptan en respuesta a los intentos fallidos del lobby pro-Polisario y pro-argelino en el Parlamento Europeo en Estrasburgo, de hacer prevalecer las revendicaciones de los separatistas que piden la prórroga del mandato de la MINURSO al control de los derechos humanos, reclamaciones que ya han sido rechazadas por el Consejo de Seguridad de la ONU.
Además Morgherini recordó, de paso, las preocupaciones de la UE con las consecuencias del viejo conflicto del Sáhara Occidental, para la seguridad y la cooperación regional y por los derechos humanos y las condiciones de vida en los campamentos Tinduf en Argelia.
La UE sigue de cerca la evolución de este conflicto, añadió, sigue apoyando los esfuerzos de las Naciones Unidas para lograr una solución política justa y duradera.