Gran parte de la ayuda humanitaria de la Unión Europea destinada a los saharauis en los campamentos controlados por el Polisario en Tinduf, es objeto de desviación sistemática desde la llegada de la ayuda al puerto argelino de Orán, revela una informe de la UE.
La ayuda humanitaria de la UE se desvía desde hace varios años a través de canales dirigidos por responsables argelinos y del Polisario, según el documento de la OLAF, la Oficina de Lucha contra el Fraude de la UE.
El informe ha sido establecido en 2007 tras una investigación de la Oficina Europea de Lucha contra el Fraude durante más de cuatro años. El documento, sin embargo, se mantuvo en secreto durante siete años por razones aún no explicadas. La Junta también tiene los nombres de los involucrados en este tráfico, pero vacila en hacerlos públicos por razones igualmente misteriosos.
Es la comisaria europea del Presupuesto Kristalina Georgieva quién lo reveló, el jueves, 22 de enero ante el Parlamento Europeo, la existencia de este informe.La Comisaria ha otorgado a un «olvido» la no publicación del informe durante más de siete años.
De acuerdo con la investigación de la OLAF, los traficantes sustituyen por productos de mala calidad de la ayuda humanitaria internacional que se encargàn luego de revender.
Sin embargo, a pesar del descubrimiento de este escándalo, los 10 millones de € de la ayuda europea a los campamentos del Polisario en Argelia no se han suspendido.
Para la OLAF, «una de las razones que hicieron que estas desviaciones sean posibles es la sobreestimación del número de refugiados y, por tanto, la ayuda proporcionada.»
Esta amplificación artificial se mantiene desde 1975 por las autoridades argelinas. Argelia avanza la cifra de 155.000 saharauis que viven en los campamentos controlados por el Polisario, el frente apoyado por Argelia en el asunto del Sáhara Occidental que le opne a Marruecos.
Pero a pesar de la insistencia de las ONG internacionales y de Marruecos, «ni Argelia ni el Frente Polisario acordaron que un censo de la población de los campamentos pueda organizarse», insiste la OLAF.
El informe de la Oficina Europea de Patentes también encontró que la descarga de la ayuda y la construcción de edificios financiados por la ayuda internacional son hechos por «prisioneros de guerra o civiles.»