El conflicto de Malí hace planear el riesgo de infiltraciónes de terroristas en el Sáhara Occidental (sur de Marruecos) y una radicalización en los campamentos de refugiados de Tinduf, en el suroeste de Argelia. Tales son los asuntos que hoy preocupan al Secretario General de la ONU, Ban Ki-Moon, que ha abogado este lunes por una solución urgente a la cuestión del Sahara marroquí. «El aumento de la inestabilidad y la inseguridad en los alrededores del Sahel requiere una solución urgente al conflicto que ha durado desde hace mucho tiempo», advirtió en su último informe sobre el Sahara presentado 5 de abril al Consejo de Seguridad en Nueva York. Al igual de su enviado personal para el Sáhara Occidental, Christopher Ross, que acaba de terminar una gira por la región, el jefe de la ONU recuerda que «todos los gobiernos consultados se han seriamente preocupado sobre el riesgo de desbordamiento del conflicto de Malí a los países vecinos, y temen que ayude a la radicalización de los campamentos de refugiados de Tinduf «, controlados por el Frente Polisario bajo supervisión de las autoridades argelinas. Ban Ki-Moon se preocupa también por la seguridad del personal de la Misión de las Naciones Unidas (MINURSO) encargada de supervisar el alto el fuego desde 1991, en el Sáhara Occidental, sobre todo debido a la «posible infiltración de elementos armados y de lagunas en la coordinación de la seguridad regional «.
Recordó en este sentido, el secuestro en los campamentos de Tinduf de tres humanitarios europeos en octubre de 2011 y la retirada en 2012 de 17 humanitarios que trabajaban en los campamentos. También señaló que «ha llegado el momento de que las partes avancen hacia una solucion sostenida y alentada por la la comunidad internacional» llamàndo a Marruecos y Argelia «a redoblar sus esfuerzos para aprovechar mejores relaciones y de la apertura de las fronteras en beneficio de la región y la comunidad internacional en su conjunto «. De acuerdo con el informe de Ban al Consejo de Seguridad, un líder de la región describió los campamentos de Tinduf como una «bomba de relojeria «. Volviendo al tema de la identificación de las poblaciones en los campamentos de Tinduf, Ban Ki-Moon, dijo que el Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados sigue persiguiendo su diálogo con el país de acogida, es decir, Argelia, de conformidad con las recomendaciones contenidas en su informe del 5 de abril y la última resolución 2044 del Consejo de Seguridad.