Las familias de los desaparecidos en Argelia continuàn de estar confrontados al mutismo del gobierno sobre la suerte de las victimas de las violencias de los años 90. Por tanto, las autoridades no se limitàn en hacer de orejas una tapia a ésas revendicaciones. Hacen, sin embargo todo para impedir ésas familias del simple hecho de manifestar pacificamente y de expresarse, provocando una indignada reaccion de las ONGS internacionales.
Asi, Amnestia Internacional, La Red Euro-Mediterranea de los Derechos Humanos (REMDH) y el Observatorio para la Proteccion de los Derechos Humanos (que es un programa conjunto de la Federacion Internacional de los Derechos Humanos –FIDH – y de la Organizacion Mundial Contra la Tortura – OMCT), han enérgicamente reaccionado contra la violenta prohibicion de una pacifica manifestacion que deberia de haber sido organizada el miércoles 11 de agosto en Argel. Las fuerzas de seguridad han impedido varias decenas de allegados de las victimas de las desapariciones forzosas de organizar una manifestacion pacifica.
Ninguna explicacion oficial ha sido dada a las familias sobre las verdaderas razones de ésta prohibicion, los responsables de la seguridad se limitabàn en indicar que aplicabàn « ordenes de arriba ».
Estàs organizaciones han llamado Argel a permitir a las familias de las victimas de las desapariciones forzadas de organizar manifestaciones pacificas, sin temor de represalias. Insisten tambien para que las autoridades argelinas respondàn a las legitimas peticiones de ésas familias para conocer la verdad, de obtener justicia asi como una reparacion adecuada.
Las familias de las victimas de las desapariciones forzadas reclamàn desde hace años que las autoridades argelinas revele la suerte que han corrido sus allegados, que han desaparecido desués de haber sido raptadas por las fuerzas de seguridad durante las sangrientas violencias de los años 90, una casi guerra-civil, que ha heco decenas de millares de muertos.
A partir de 1988, éstas familias organizan casi todos los miércoles, manifestaciones pacificas frente al organismo oficial de los derechos humanos en Argel, la CNCPPDH, y su predecesor el Observatorio Nacional de los Derechos Humanos.