Un influyente sindicato en España ha decidido procesar a los dirigentes del Polisario y ONG y asociaciones españoles les que apoyan, por fraude masivo y la apropiación indebida de la ayuda humanitaria destinada a las poblaciones en los campamentos de Tinduf.
El sindicato español de los funcionarios públicos «Manos Limpias»muy influyentes en España, el jueves presentó una denuncia ante la Fiscalía Anticorrupción en Madrid.
El sindicato acusa a los dirigentes del Polisario y los de la «Coordinación de las asociaciones de solidaridad con el Sahara» (CEAS-Sáhara) como responsables del fraude de 20 millones de euros y del desvío masivo de ayuda humanitaria para los refugiados en Tinduf.
El sindicato español se basó en su denuncia en el informe publicado en febrero de 2015 por la Oficina Europea de Lucha contra el Fraude (OLAF), que ilustra, con cifras en apoyo, la envergadura de estos fraudes y desviación de la ayuda entre 2003 y 2007.
La OLAF de hecho había revelado que Argelia y el Polisario llevan a cabo desde el año 1991, la desviación sistemática de la mayor parte de la asistencia humanitaria internacional.
La ayuda de 10 millones de euros que la UE concede anualmente a los habitantes de Tinduf, a través de la Dirección General de Ayuda Humanitaria (ECHO), no escapó a estas prácticas fraudulentas.
«Manos Limpias»exige a tal efecto, la apertura de procesos judiciales contra los autores de este tráfico a gran escala para determinar la magnitud de los daños sufridos por los proveedores de asistencia e identificar y llevar ante los jueces a los responsables de estos actos abominables cometidos contra miles de saharauis injustamente aislados durante cuarenta años en Tinduf, bajo un sol abrasador en el desierto argelino.
Según los querellantes, el fraude de 20 millones de euros consistia en manipular el número real de personas en los campamentos de Tinduf, el desvio del dinero y la reventa de la ayuda alimentaria a los países vecinos.
Unas práctica digna de redes mafiosas, que muchos diputados han criticado fuertemente en las instituciones europeas en Bruselas y Estrasburgo. Algunos incluso pidierón el cierre del maná de la ayuda para impedir los caciques y dignatarios del Polisario a continuar de enriquecerse ilegalmente.
En sudenuncia, «Manos Limpias» por fin señala la complicidad entre los representantes del Polisario en españa y las ONG y organizaciones españolas, entre ellas la CEAS-Sáhara que dirige José Taboada, quién se encargaba del fraude.